Es todos los días, distinta hora, distinto lugar, la misma sensación de sosiego. Una rutina dulce y placentera, necesaria. Sentarme a escribir. No existe día en el que algo no me llame a hacerlo, una dependencia enorme, vomitar las cosas que vengo guardando y que están tan contenidas.
Puedo llamarlo refugio, salida, irrealidad. Pero no existe, es indescriptible lo que soy yo cuando dejo que las palabras se escapen, una esclava de la inconciencia. Como si muriera y volviera a nacer unos minutos después, pero son tan lindos esos minutos antes, el tiempo pleno y puro, el silencio. Un respiro después de tanto ahogo, el placer abstracto de saber que nada existe, solo algo parecido a mí que se convierte en mí para engañarme y sonreir y ser de una vez por todas. No parece tan complicada la acción de dibujar líneas ensambladas que significan palabras que significan cosas que significan. Pero lo es, un estado de esencia, plenitud, yo contra el mundo que es tan fácil respirar, invisible pero presente al fin. Y me encanta luchar contra mí también, una discusión entre quien es y quien escribe, quien busca y quien encuentra, quien ve y quien observa. Es lindo porque puedo ganarme el segundo quien, pero qué engañoso es todo si acaso apenas me doy vuelta desaparece y lo pierdo para siempre, y quién sabe cuándo volverá, tal vez nunca y me vea obligada a ser y a salir al mundo para el que no estoy preparada, sin tan bien estoy con ese quien, si tan bien estaba y tan mal al mismo tiempo.
"cada uno en su lengua puede exponer recuerdos, inventar cuentos, emitir opiniones; a veces incluso adquiere un estilo hermoso, que le proporciona los medios adecuados y le convierte en un escritor valorado. pero cuando se trata de urgar por debajo de los cuentos, de hacer mella en las opiniones y de alcanzar las regiones sin memorias, cuando hay que destruir el yo, no basta con ser un "gran escritor", y los medios deben resultar siempre inadecuados, el estilo devenir en no estilo, la lengua libera una extranjera desconocida, para que uno alcance los límites del lenguaje y devenga otra cosa que escritor" Gilles Deleuze
3 comentarios:
sí, no debería escribir enojado, pasa eso
en fin...
espero que esté mejor todo por allá
te quiero, pedazo de sanguinaria
seguí escribiendo
mira no arrugo, mira mira
bue paula yo no hago comentarios inteligentes porq el simple hecho de q me da paja :)
pero bue en fin
q se yo
...
esteeemmm
bueno basta
si queres escribir todos los dias escribi
y punto
la puta madre
qué raro es esto ...yo escribiendo ,no es lo mio, lo mio es decirte mi orgullo de verte crecer así
acá , tu mamá
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