Probablemente, quizás
el mejor recuerdo de mi inútil vida
fue aquel momento en que tus ojos,
tus límpidos y relucientes
y renovados
y solitarios ojos
me tradujeron
tus sueños.
Cada uno de tus inocentes
y tímidos sueños,
y entonces supe que yo era el único camino
más o menos seguro
para que pudieras, aunque sea,
besarlos con la mirada,
llevarte una imagen,
quitarles el alma,
yo o mis labios,
o mi tiempo malgastado,
o mis palabras rotas,
como las de este poema que sin quererlo
se me cae a pedazos.
Pero nunca en tus sueños y tú,
siempre en mis brazos.
"cada uno en su lengua puede exponer recuerdos, inventar cuentos, emitir opiniones; a veces incluso adquiere un estilo hermoso, que le proporciona los medios adecuados y le convierte en un escritor valorado. pero cuando se trata de urgar por debajo de los cuentos, de hacer mella en las opiniones y de alcanzar las regiones sin memorias, cuando hay que destruir el yo, no basta con ser un "gran escritor", y los medios deben resultar siempre inadecuados, el estilo devenir en no estilo, la lengua libera una extranjera desconocida, para que uno alcance los límites del lenguaje y devenga otra cosa que escritor" Gilles Deleuze
2 comentarios:
a veces te salen cosas fuertes de verdad
Hola Pau... hay algo para vos en mi ojo azul, que se reconfirma cuando expresas cosas como esta
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