- Decorar los discursos con palabras extrañas.
- Alargar oraciones con adjetivos hasta provocar la asfixia del lector.
- Interponer acciones concretas, realizadas preferentemente por partes del cuerpo humano u objetos ordinarios.
- Utilizar un punto y aparte de vez en cuando, como para evitar el aburrimiento o la sensación de longitud extrema.
- Las descripciones no deben ser demasiado extensas, a lo sumo algunos rasgos físicos o cualidades de la personalidad. Nada de doble sentido, ambigüedad o connotación.
- Puntualidad.
- Claridad.
- Escructura ordenada.
- Uno, dos, tres.
- Final. Partida, muerte, encuentro, aclaración del misterio. Cerrado.
- Una única interpretación y si es posible ausencia de metáfora o mensaje.
- Posición neutral. Ni de izquierda, ni de derecha. Ni proletario ni burgués.
- Debe estar basado en la intención de informar un hecho. A lo sumo dos.
- Pocos personajes, para evitar confusiones.
- Seco, inexpresivo.
"cada uno en su lengua puede exponer recuerdos, inventar cuentos, emitir opiniones; a veces incluso adquiere un estilo hermoso, que le proporciona los medios adecuados y le convierte en un escritor valorado. pero cuando se trata de urgar por debajo de los cuentos, de hacer mella en las opiniones y de alcanzar las regiones sin memorias, cuando hay que destruir el yo, no basta con ser un "gran escritor", y los medios deben resultar siempre inadecuados, el estilo devenir en no estilo, la lengua libera una extranjera desconocida, para que uno alcance los límites del lenguaje y devenga otra cosa que escritor" Gilles Deleuze
1 comentario:
Y que haya uno "MALO" uno "BUENO" y uno "INTERMEDIARIO".
El intermediario es el objeto de amor. ¿Se entiende? ¿Me explico?
Y las palabras extrañas son sólo para hacerse los power. Y por lo general tienen un asterisquín para que no uses tu capacidad de agarrar un diccionario y explorar.
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