8.1.15

pequeña fotografía estival

a nadie le interesa ver nada, por lo tanto
a nadie le interesa hablar de nada, yo, por ejemplo
estoy encerrada en una tarde de calor
vivo en una ciudad que a esta hora
en esta época
se desborda de gente desconocida para ella pero de alguna forma
mardel le brinda una amistad incondicional
y parece recibirla en todos sus rincones
la gente se siente bien, dice
porque les dan de comer, les prestan
carpas para que se protejan del sol
y puedan comer sin que nadie los vea, les dan
estacionamientos
boliches
bares
mujeres
juegos interactivos

no pretendo juzgar porque tampoco
me interesa, de hecho
no estoy en eso, no pretendo estarlo
pero parece que esto los entusiasma, y caminan
muy apretados
se dan la mano compulsivamente, se agarran los brazos
para no caerse
para no ser atropellados
eso sí
nunca
se miran a los ojos y menos
a los chicos que están
todavía más cerca del piso, claro
tampoco ven la basura que tiran
y no quiero comparar a los chicos con la basura
pero casi lo hago


los días están contados, yo creo que el caudal de transpiración
no es proporcional al calor
/ que es mucho menor que en sus ciudades /
sino al tiempo que les queda
para disfrutar de todo lo que ese lugar les da y ellos
a veces
sienten que no saben verlo
no pueden
aprovecharlo
la plata se les va y eso
debe ser angustiante, por eso no me provocan
odio ni repugnancia, más bien
lástima y a la vez
la extraña sensación de que son mi espejo:

yo también
cuando ingreso en el mundo de las maravillas
me siento espantosamente mal
y sonrío menos de lo habitual
y siento que nada tiene remedio
como este lugar
es mi costumbre, este
es mi infierno, como es el suyo
su lugar en el mundo
así funciona.
es muy simple.

pero nadie quiere verlo.
yo tampoco sé si hace falta, si este poema
debería ser tan largo, si es estrictamente necesario
y si va a cambiar algo en el comportamiento en general
estaré viva cuando esto
en verano
sea un desierto sólo para nosotros y nuestros hijos
o el hábitat de gente cada vez más infeliz

confío en lo segundo
nada
ni siquiera este lugar
/ ahora tan especialmente naranja /
es distinto ni se aleja
del mundo.

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